Minería Sostenible: gestión eficiente del agua en Cobre Panamá

La industria minera juega un papel crucial en la economía global, y su operación eficiente es esencial para la sostenibilidad de nuestros recursos naturales. En este contexto, Cobre Panamá destaca como un modelo de minería sostenible, especialmente en su manejo del consumo de agua en la minería y la mitigación de la contaminación del agua.
Gestión del agua en Cobre Panamá
Cobre Panamá ha implementado un sistema avanzado de captación y recirculación del agua de lluvia, que permite reutilizar hasta el 78% del agua en sus operaciones. Este enfoque no solo reduce el consumo de agua fresca, sino que también minimiza el impacto ambiental al asegurar que el agua utilizada proviene principalmente de la lluvia captada.
La planta de procesos y la instalación de manejo de relaves son ejemplos clave de esta gestión. En estas instalaciones, el agua utilizada en la flotación y otros procesos mineros se recircula continuamente, disminuyendo la necesidad de extracción de fuentes naturales. Este sistema es vital para reducir el consumo de agua en la minería y garantizar que se mantenga la calidad del agua en el entorno.

Calidad y monitoreo del agua
Cobre Panamá realiza un extenso monitoreo de agua a través de más de 250 estaciones en ríos y quebradas, asegurando el cumplimiento con las normas nacionales de calidad del agua. Además, se han implementado sistemas de alerta temprana y monitoreo en tiempo real, que permiten detectar y mitigar cualquier impacto negativo en los recursos hídricos de manera inmediata.
Para asegurar la transparencia y el compromiso comunitario, se ha involucrado a 14 comunidades locales en el monitoreo participativo, con la asesoría de técnicos internacionales independientes. Este enfoque colaborativo no solo fortalece la confianza de la comunidad en las operaciones de Cobre Panamá, sino que también mejora la gestión y protección de los recursos naturales.
Innovaciones y compromisos ambientales
Uno de los compromisos más notables de Cobre Panamá es la reducción de emisiones de CO₂, proyectando una disminución del 50% para el año 2030. Esta meta está alineada con su objetivo de reducir la contaminación del agua y otros impactos ambientales. La empresa también ha adoptado tecnologías innovadoras, como la electromovilidad y sistemas híbridos en sus equipos de operación, lo que contribuye significativamente a la reducción de su huella ecológica.
Por otro lado, la educación y la participación comunitaria son pilares fundamentales en la estrategia de Cobre Panamá. Más de 10 mil colaboradores han sido capacitados en compromisos ambientales, promoviendo una cultura de minería sostenible y respeto por los recursos naturales. Y es que estas iniciativas educativas no sólo benefician a la empresa, sino que también potencian y empoderan a las comunidades locales.
